domingo, diciembre 08, 2002

Así no Señor Presidente. Así no.

Con rabia y desilusión leí, en la portada de la edición electrónica de su prestigioso medio de comunicación del jueves 6 de Diciembre, el artículo “HIPÓLITO PIDE APLAUDIR "HIJO DEL JEFE”. En dicho artículo, redactado por Manuel Jiménez, se describe como el Presidente de todos los dominicanos se desbordaba en elegios a los exiliados cubanos y a los descendientes de Trujillo.
Se entiende el elogio a los exiliados cubanos en Miami. El señor Hipólito sabe que nadie va a Miami y se marcha sin bailar al son de los exiliados cubanos, los cuales, con razón o no, son una fuerza política.

Lo que no entiendo es ¿qué beneficio político obtendrá el Excelentísimo Señor Presidente Hipólito Mejía al desbordarse en elogios y aprobaciones hacia los Trujillo?
Por ejemplo. el artículo expresa que “En el curso de sus palabras, el presidente Mejía destacó la presencia en el encuentro de Luis Rafael Domínguez, esposo de Angelita Trujillo”

Además señala que nuestro Presidente, Hipólito Mejía consideró el Yerno de Trujillo como a su “primo”.

Como si esto no fuera suficiente para levantar de sus tumbas a los cientos de dominicanos que cayeron ante la macabra garras del trujillismo, incluyendo “Las Mariposas”, nuestro Presidente, Hipólito Mejía agregó "¡Qué cosa más agradable combinar los yernos y los nietos de los cubanos con los yernos y los hijos de Trujillo!", entre aplausos.

Los de los exiliados cubanos se lo acepto. Yo viví en Miami y allá sólo existe la “democracia” anti-Fidel, y si alguien quiere ganarse la simpatía de los exiliados tiene que bailar al son de su música, pero... ¡los elogios a los Trujillo!

Así no Señor Presidente. Así no.

Felipe Lora
El Loro Dominicano
8 de diciembre del 2002